En memoria de mi fallecida Madre Diorcely Flórez Arroyo.
Temía sentarme a escribir este texto porque que creí que se me desgarraría el alma, no me sentía capaz de hacerlo, pero una vez más estoy tratando de regalarte un pedacito de mí con este escrito.
Como contarle al mundo mi dolor y como impactar tú vida sin provocar lástima, la pérdida de un ser querido es algo que creemos nunca nos va a tocar, parece un sueño o una pesadilla, a ratos intentamos creer que simplemente no está pasando.
Por momentos tratamos de olvidarlo por completo para poder continuar con nuestras labores diarias, también le decimos a nuestra mente y a nuestro corazón lo fuerte que deben ser ; pero lo cierto es que cuando no podemos seguir evadiendo ese dolor que seguramente nunca se va a ir, es cuando sabemos que tendremos que convivir con él, por el resto de nuestras vidas.
“ El dolor de tu partida es un vacío que nada ni nadie podrá llenar, es pensar en ti y anhelar ese abrazo, esa despedida, esa que no alcancé a dar, es revaluar todas las obras que tuve contigo, así como con esos seres que aún continúan aquí y a los cuales amo, es recordar tú sonrisa y esos lindos momentos que ya no volverán jamás ” .
El dolor de tú partida me ha hecho saber que se puede reír en medio del dolor, es saber que creer en Dios es más que decir que creemos, porque en estas pruebas nos llenamos de rabia y no entendemos esos cambios inesperados de la vida, creer en Dios es demostrarnos y demostrarle a él que pese a todo lo seguiremos buscando, y si por alguna razón nuestro corazón se endureciera, el buscará la forma de no dejarnos ir una vez le hayamos conocido.
Tu partida no la entiendo pero el dolor que siento cada día pese a que sé que estas mejor descansando que viviendo o sufriendo el dolor físico de esto que se llama vida, ese dolor sí que se siente, sí que no se espera nunca.
Aunque sé que donde estas quizá no tienes acceso a leer esto, pienso y sueño que me escuchas y me cuidas… Hoy sólo puedo decirte Madre mía que honrare por siempre tu memoria, tu legado estará por siempre conmigo y que te sentirás tan o más orgullosa de mi de lo que siempre te sentiste, porque tu enseñanza y tu pasó por esta vida no sólo me impactó a mí, sino a decenas de personas.
Para ti que estás leyendo esto y que quizá hayas sufrido una pérdida reciente, se que soy yo la menos indicada para decirte como NO sentir dolor, pero lo único que si te puedo decir es que pase lo que pase Dios nunca te va a soltar.
Y si aún gozas de esos seres a los que más amas, vé corre dales un abrazo y dile cuanto los amas, porque nunca sabrás cuando podrías ser el último… No te quedes con esa sensación de ese abrazo que no diste o de ese te amo que nunca dijiste.
Pero sobre todo sobre todo acepta el dolor de su partida y renace cada día, porque siempre hay alguien que te espera y para el que seguramente serás motivo de inspiración.\
Espero te haya servido mi escrito, déjame tus comentarios que te responderé.
Con amor May…